La semana pasada se llevó a cabo el Foro Regional Latinoamericano de la IBA, en el cual más de 700 delegados de firmas de servicios legales en América Latina se reunieron para discutir los desafíos y oportunidades que enfrenta la industria legal en la región.
Uno de los temas más destacados fue la relación entre tecnología y servicios legales. En un mercado cada vez más competitivo, los abogados no pueden permitirse el lujo de no utilizar herramientas tecnológicas para mejorar su eficiencia y capacidad de respuesta. Los clientes buscan soluciones rápidas y eficientes para sus necesidades legales, y los abogados deben estar a la altura de las circunstancias.
En este contexto, un panel discutió la perspectiva interna sobre las operaciones legales y las nuevas herramientas tecnológicas que remodelan los servicios legales. Los abogados internos compartieron sus ideas sobre cómo las firmas de servicios legales pueden mejorar su oferta de servicios mediante la fusión de servicios legales tradicionales con herramientas innovadoras. Se debatió sobre qué es innovador, qué agrega valor y cómo se puede transferir valor al cliente.
Otro tema destacado fue el impacto de las fake news y las redes sociales en la industria legal y las inversiones en América Latina. Las noticias falsas se han convertido en una gran preocupación en todo el mundo, y su impacto en la sociedad, la democracia y la economía es cada vez más evidente. Además, las redes sociales están reemplazando a la prensa tradicional como fuente de información e influencia en millones de personas. Los participantes discutieron sobre las diferentes alternativas prácticas y jurídicas que abordan esta materia.
En conclusión, el Foro Regional Latinoamericano de la IBA proporcionó una oportunidad invaluable para que los profesionales de servicios legales en la región se conecten, compartan ideas y discutan los desafíos y oportunidades que enfrenta la industria legal. Los temas discutidos demostraron que el mercado de los servicios legales está en constante evolución, y los abogados deben estar dispuestos a adaptarse y utilizar nuevas herramientas y tecnologías para mantenerse relevantes y eficientes.
