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Si eres como la mayoría de los dueños de pequeñas firmas de abogados, muy posiblemente te consideres a ti mismo primero como un abogado y luego como un empresario. Incluso puede que la idea de empresario suene bastante ajena a la percepción que tienes de tu profesión y prefieras dejarlo a administradores e ingenieros. Sin embargo, el título de empresario se ajusta más a tu puesto en la firma, por lo que deberías asumirlo con mayor convicción.

Si el objetivo de tu negocio no es exclusivamente sobrevivir, sino que deseas alcanzar nuevos logros en tu firma y deseas ver un crecimiento considerable con el paso de los años, es momento de tomar muy en serio tu labor de empresario y tener en cuenta los detalles operativos y financieros que pueden llegar a estar perjudicando tu negocio. Para ello, el seguimiento de las métricas adecuadas es fundamental.

A continuación te compartimos tres métricas que consideramos deben tener en cuenta todas las pequeñas firmas.

Esfuerzo dedicado en cada asunto

Todos los asuntos son diferentes. Es por esta razón que debes tener un método definido para rastrear las actividades que se realizan con cada cliente. Cuando comprendes realmente cuánto esfuerzo se requiere para llevar un asunto desde el momento en que llega a tu firma hasta su finalización, la seguridad que tendrás a la hora de facturar será mayor. Este análisis incluso te permitirá una estimación mucho más acertada a la hora de evaluar asuntos similares en el futuro.

Posiblemente este punto ya lo sabías, y es también muy probable que sea la metodología que utilizas a la hora de facturar a tus nuevos clientes. Sin embargo, los métodos que estás utilizando y las métricas a través de las cuales realizas tus deducciones puede que no sean tan precisas como deben serlo. Es entonces cuando te recomendamos hacer uso de sistemas de gestión ajustados a tus necesidades, que te permitan llevar un seguimiento de todos los procesos, de los tiempos, de las reuniones y de los recursos que tus abogados necesitaron para cada asunto.

Cargas de trabajo individual y en equipo

Todos en la firma están muy ocupados, es normal. Incluso puede suceder que pasen semanas en las cuales sea casi imposible realizar un balance en el cual puedas tener una idea de las cargas de trabajo de cada uno de tus colaboradores y no sea posible medir el progreso en sus asuntos.

Lo anterior, consecuencia del ritmo natural de cualquier firma de abogados, puede llegar a causar malas decisiones empresariales. Puede ser que estés asignando mucho trabajo a un miembro del equipo más que otros, o puede que no estés aprovechando al máximo el tiempo de uno de tus abogados más costosos.

¿Por qué no dejar que la tecnología resuelva estos problemas por ti? Gracias a Practice Management Systems como Time Manager puedes tener una visión panorámica y completa de tu firma que te permita observar las cargas de trabajo asignadas a cada abogado, así como puedes acceder de inmediato a sus asuntos, observar sus progresos y definir claramente el valor que tiene para los clientes.

Reportes de referencia

A veces, hay tareas que parecen tomar una cantidad desproporcionada de cada día. Es momento de llevar seguimiento de las tareas que cada miembro de tu equipo está realizando y el tiempo que le toma del día darla por terminadas. Gracias a los reportes que se pueden generar en el Dashboard Gerencial de la plataforma de Time Manager, llevar un seguimiento de la duración de las tareas asignadas a cada abogado será mucho más rápido, y las decisiones que se tomen a partir de estos resultados serán más acertadas.

Finalmente, nuestro objetivo es mostrarte tres puntos que debes tener muy en cuenta para observar el progreso de tu pequeña firma de servicios profesionales y recordarte que la medición es clave para tomar decisiones más acertadas y seguras. Tomar decisiones a partir de la suposición puede llegar a funcionar en ocasiones, pero los riesgos que trae basarse únicamente en la suposición pueden llegar a ser mayores que los beneficios.